¡Hola! ¿Os aburrís? ¿Os apetece darle un poco de ‘marcha’ a vuestro cerebro y, de paso, activarlo? ¡Pues seguid leyendo!
Es un hecho: para que algo no se atrofie, hay que mantenerlo activo, darle ‘caña’ (ojo, en el buen sentido, ¿eh?). Ocurre con músculos y órganos, especialmente con el cerebro. Si, una vez que somos mayores, no lo ejercitamos y estimulamos, corremos el riesgo de que pierda capacidad y de que poco a poco se vaya apagando.
¿Y qué hacer para estimularlo? Para empezar, un poco de ejercicio.
Sí, la actividad física (caminar, bailar, nadar…) incrementará vuestro bienestar general y os predispondrá mentalmente a absorber todo lo bueno que hagáis por el cerebro. De hecho, algunos estudios aseguran que la combinación periódica de ejercicio físico con la utilización de, por ejemplo, un ordenador, tablet o teléfono móvil (para navegar por internet y entrar en el blog de Jandoniz, escribir emails, leer los periódicos…) contribuye a reducir el riesgo de pérdida de memoria relacionada con el envejecimiento.
Nuestro cerebro tiene la capacidad de fabricar neuronas también cuando nos hacemos mayores. Basta con hacer lo adecuado, con practicar lo que se llama la estimulación cognitiva.
Con los juegos de mesa (parchís, tres en raya, damas, ajedrez…) ejercitaremos nuestra capacidad de cálculo y atención. También hacen mucho bien a nuestro cerebro la lectura (de novelas, ensayos, periódicos, revistas…) y la memorización (hay cuadernos con ejercicios para ello; y es una estupenda idea, si se dispone del ánimo necesario, lanzarse a la apasionante aventura de aprender un nuevo idioma). Y nunca es tarde para aprender a tocar un instrumento, apuntarse en un coro o cuidar de un perro o gato.
¡Que el cerebro no pare!
